EME 1
“EME1” se emplaza en el Eixample barcelonés, en una típica construcción de finales de siglo XIX, de crujía angosta (6 metros), techos altos (3,40m) y una distribución obsoleta.
Los propietarios; una pareja germano-española con 3 niños, que usaría el piso por temporadas cortas, está acostumbrada a vivir en espacios diáfanos y amplios, lo que suponía destreza en el planteamiento de la distribución funcional, para conciliar las limitaciones físicas del piso heredado (80 m2) con un programa amplio: zona de día + 3 dormitorios + 2 baños, sin renunciar a la fluidez y amplitud acorde con la personalidad de sus propietarios, pero sin renunciar tampoco a la funcionalidad y privacidad requerida.
Para conseguirlo se emplearon soluciones minimalistas, como el recurso de planta abierta para unificar espacios con funciones complementarias, el predominio de la línea recta y las formas puras, la porosidad visual de los cerramientos, y la elección de colores claros.
Dos circunstancias bien aprovechadas, multiplicaron la sensación espacial: la altura del piso, mantenida en casi todos los ambientes en su máxima expresión y una antigua galería abierta, que con dos pares de puertas plegadizas se incorporan al espacio interior, o convierten a todo el piso en un espacio exterior, o bien transforman la galería en un invernadero para las tardes soleadas.
La ubicación de la cocina resultó clave para la articulación del resto de espacios: ocupando el centro geográfico del piso, actúa como bisagra entre zona de día y zona de noche. Resuelta con muebles en columna, que giran y resuelven también el armario recibidor y la ocultación de las instalaciones.
Hacia el pulmón de manzana formando un “open space” con la cocina, se desarrolla toda la vida social de la vivienda. Nuestro espacio abierto para la zona de día, requirió tirar abajo el tabique longitudinal que atravesaba el piso en toda su longitud, lo que supuso refuerzos estructurales, de forma tal que un entramado de vigas de hierro atraviesa el espacio principal sin fragmentarlo, reemplazando el antiguo tabique divisorio.
Los otros dos cuartos contiguos a este espacio abierto (baño y cuarto de estudio), están delimitados por una gran puerta corredera de acero y cristal, que se abren o cierran según convenga. En cambio de una puerta opaca, nos pareció sugestivo proponer una puerta trasparente, para ganar en fluidez visual. Mediante la elección de vidrios de diferentes acabados y niveles de transparencia, aportamos versatilidad a este cerramiento y multiplicamos las opciones de privacidad.
En el programa requerido, los propietarios creían necesario disponer dos cuartos de baño para dar servicio a la numerosa familia. La estrategia de compartimentar el baño en tres espacios independientes, nos permitió prescindir de un cuarto de baño: así las cosas, la zona de lavabo, zona de váter y zona de aguas, permite que el baño se utilice simultáneamente por tres personas, sin usar m2, que son aprovechados para otras funciones.
Respecto de los acabados, se planteó una combinación de materiales acorde al espíritu original de los elementos existentes. Guiados por el “aire industrial” que pretendían los propietarios, se dejaron muros de ladrillo visto y se diseñó la instalación de clima (aire acondicionado y calefacción) de forma tal que pudiese quedar vista, jugando con el entramado de vigas de madera originales y vigas de hierro de refuerzo complementarias.
Ante la preexistencia de materiales tan heterogéneos, nos valimos de tres elementos que actúan como hilo conductor y cromático para la unificación de los espacios:
– tableros de madera-cemento de color gris, que por su característica hidrófuga se aplicó en todo el pavimento de la vivienda, incluido baño.
– acero negro, presente en los refuerzos estructurales y las nuevas y amplias carpinterías del piso, que dan respuesta a las diferentes opciones de circulación, funcionamiento y transparencia.
– el color verde aplicado en las carpinterías de madera antigua, los azulejos de pequeño formato y la pintura del cuarto de baño, entendido como una caja verde, que sin elemento de cierre, se despega del «open space» por su cromatismo y menor altura.
Los diferentes elementos de acero forman un hilo conductor que, resuelve los cerramientos, refuerzan la estructura, zonifican la gran altura, y resaltan el contraste entre los elementos originales y los que aportamos en la renovación.
“EME1” parte de una exigente intervención estructural, que resuelve la actualización de una distribución obsoleta, incorporando recursos contemporáneos a una vivienda que vuelve a vivir, con un aire industrial, fluida, flexible y contemporánea.
Ubicación: Eixample, Barcelona
Reforma: Reforma integral de vivienda con afectación estructura
Año: 2019
Superficie: 80m2
Fotografía: Valentín Hincû